Aída, anfitriona de Carabanchel: “Aquí los viajeros encuentran un Madrid auténtico”
“Tengo en el comedor una bola del mundo y voy poniendo alfileres en los países de origen de mis huéspedes. Tengo muchas ganas de que me visiten desde África. ¡Es el único continente que me falta!”.
Aída empezó a compartir una habitación vacía en su piso de Carabanchel hace tres años. “Lo tuve que reformar y para poder pagar la reforma tuve que conseguir un segundo empleo como profesora de repaso de matemáticas. Pero al final me costaba mucho compaginar los horarios de los dos trabajos. Yo ya había usado Airbnb como viajera y pensé ‘¿Por qué no?’”.
El barrio de Carabanchel es un barrio poco turístico. Muchos de los que vienen a hospedarse aquí buscan conocer un Madrid más auténtico: los bares de tapas de toda la vida, la churrería…
“Aún recuerdo a mis primeros huéspedes: dos chicas de Hamburgo. Yo estaba tan nerviosa por hacerlo todo bien que me fui a esperarlas a la boca del metro ¡media hora antes!”.
“El barrio de Carabanchel es un barrio poco turístico. Muchos de los que vienen a hospedarse aquí buscan conocer un Madrid más auténtico: los bares de tapas de toda la vida, la churrería… Les encanta salirse de las zonas turísticas”.
Sobre las razones para hospedar, Aída lo tiene claro: “Ahora ya no necesito esa ayuda económica, pero lo sigo haciendo porque me encanta recibir a personas de otras culturas. Con muchas haces amistad. Ahora tengo pendiente visitar a Hugo, uno de mis huéspedes, en Lisboa. ¡Y después Corea del Sur!”.