Airbnb.org muestra el apoyo ofrecido a las personas refugiadas

Con motivo del Día Mundial del Refugiado, Airbnb.org ha anunciado hoy que en Europa más de 42.600 personas refugiadas procedentes de Ucrania han conseguido alojamiento gratuito o temporal gracias a la generosidad de los anfitriones de su comunidad y a la colaboración con organizaciones sin ánimo de lucro. Las últimas cifras siguen el compromiso que Airbnb.org asumió en febrero de proporcionar estancias a hasta 100.000 refugiados que huyen de Ucrania. 

Polonia y Alemania son los dos países europeos que más han apoyado la iniciativa de Airbnb.org, siendo 10.000 refugiados los que ya han encontrado un hogar temporal a través de la comunidad de anfitriones en Airbnb en Polonia y casi 5.900 en Alemania. En España, por el momento 3.714 personas refugiadas han podido encontrar alojamiento temporal. 

Hasta la fecha, el equipo de Airbnb.org ha puesto en contacto a más de 107.000 refugiados y solicitantes de refugio con alojamientos temporales gratuitos¹. En respuesta a las últimas crisis, Airbnb.org ha ayudado a proporcionar alojamiento a más de 26.000 refugiados afganos desde agosto de 2021. 

Airbnb.org agradece a los anfitriones y donantes de todo el mundo que han contribuido a que esto sea posible. Muchos de estos refugiados y solicitantes de asilo han sido acogidos por anfitriones en Airbnb, incluidos más de 22.000 anfitriones de toda Europa, que se han inscrito para acoger a huéspedes sin coste alguno o con un descuento a través de Airbnb.org. 

Una red mundial creciente de socios

Además de los anfitriones, nada de esto sería posible sin la colaboración y el duro trabajo de los socios de Airbnb.org. Estas organizaciones identifican a las personas necesitadas, reservan y coordinan las estancias, proporcionan apoyo diario y ayudan a poner en contacto a los recién llegados con necesidades como alimentos, suministros, servicios legales y asistencia sanitaria. La estrecha coordinación con organizaciones sin ánimo de lucro, gobiernos y otras entidades permite que sea posible el trabajo de Airbnb.org, incluyendo las asociaciones IRC, HIAS y Church World Service, con las que la plataforma colabora desde hace años, y las más de cuarenta organizaciones que apoyan la respuesta de Airbnb.org al conflicto en Ucrania. 

Organizaciones como la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Nova Ucrania y Save the Children Suecia, la Polish Humanitarian Action, Karuna en Alemania y muchas más siguen poniendo en contacto a las personas que huyen de Ucrania con alojamientos gratuitos de corta duración en toda Europa. Más recientemente, las organizaciones Catholic Relief Services, Each One Teach One y Let’s do it! Italia se unieron  al grupo de organizaciones que trabajan con Airbnb.org para ofrecer estancias a personas en más de 80 países. En España, Airbnb.org colabora con tres ONG españolas: Rescate, Red Acoge y Diaconía Madrid.

La historia de Mariia

La OIM, socia de Airbnb.org, compartió recientemente la historia de Mariia, quien se vio obligada a huir de Ucrania poco después del comienzo de la guerra. Mariia y su marido disfrutaban de su vida en un tranquilo pueblo a las afueras de Cherkassy, pero todo cambió tras la invasión. Al principio, ofrecieron su casa como refugio a otras familias que huían del conflicto en parte del país, y en un momento dado llegaron a tener 17 huéspedes y cinco mascotas viviendo en su casa. 

Cuando el conflicto se acercó a su pueblo, Mariia tomó la difícil decisión de abandonar el país. Embarazada y con miedo, Mariia y la familia de su marido huyeron a la frontera con Moldavia, donde tuvo que despedirse de su marido, que se quedó para luchar en la guerra. Su viaje llevó finalmente a Mariia a Bratislava, la capital de Eslovaquia, donde la OIM la ayudó a encontrar un apartamento temporal gratuito de dos habitaciones a través de Airbnb.org.

El apartamento del anfitrión en Airbnb, Martin, encajó perfectamente con Mariia, ya que podía alojarse junto a su gato y estaba situado en el centro de la ciudad lo que le permitía acudir a sus citas médicas. 

Hoy, Mariia está llena de gratitud. “Estamos muy agradecidos a este país y a todos los países que apoyan a los ucranianos: algunos con donaciones, otros con alimentos, otros simplemente acogiendo a gente. Todo el mundo se está solidarizando con nuestra situación.”