Airbnb apoya el avance de la UE en las normas de alquiler de corta duración
Airbnb da la bienvenida a los avances anunciados por el Consejo de la Unión Europea en torno a la normativa de alquileres de corta duración. Para Airbnb, este anuncio supone un paso adelante hacia unas normas más transparentes y armonizadas para los anfitriones de toda la UE.
A finales del 2022, la Comisión Europea presentó su propuesta de normas sobre alquileres de corta duración a nivel europeo, que daría a las autoridades un mejor acceso a los datos a través de un marco armonizado de intercambio de datos, facilitando que las normas locales fueran claras y sencillas de seguir para los anfitriones.
La posición común alcanzada por el Consejo Europeo allana el camino a las negociaciones con la Comisión Europea y el Parlamento para ultimar las nuevas normas a finales de este año. Este avance legislativo ofrece esperanzas a muchos europeos de a pie que se ven excluidos de los beneficios de la posibilidad de ofrecer servicios de alojamiento debido a la fragmentación y desproporción de las normativas locales, diseñadas en gran medida pensando en los operadores turísticos a gran escala.
“Airbnb apoya el avance en las normas de alquiler a corto plazo en el marco de la UE, lo cual es una buena noticia para la economía generada por el sector de los viajes en la UE y para muchos anfitriones que comparten sus hogares para aumentar sus ingresos y hacer frente a los crecientes costes de vida. Airbnb sigue instando a las autoridades europeas a centrar el debate en aquellas normas locales que son desproporcionadas, debilitan el mercado único e impiden que muchos europeos de a pie puedan compartir sus hogares y se beneficien de los beneficios genera el turismo”.
Georgina Browes, Responsable de Política Pública de la UE
Airbnb ha liderado durante mucho tiempo las peticiones de una normativa comunitaria para alquileres de corta duración y ha planteado una serie de puntos en respuesta al proyecto de propuestas de la UE para ayudar a garantizar su eficacia en el marco Europeo:
- Agilizar el intercambio de datos: Airbnb apoya la creación de un marco a escala europea para compartir los datos de alojamiento. Airbnb apuesta por un verdadero portal único de intercambio de datos para las plataformas a nivel de la UE, a través del cual los datos puedan compartirse con los Estados miembros, y le preocupa que la propuesta actual aumente el riesgo de fragmentación al introducir 27 puntos “únicos” de introducción de datos.
- Un papel más activo de la Comisión: Airbnb está conforme con la propuesta de establecer principios para un registro proporcionado a nivel local y nacional. Airbnb respalda un papel más activo de la Comisión en la evaluación y verificación de la proporcionalidad de los regímenes de registro, lo que contribuiría a garantizar una mayor uniformidad en la aplicación de las normas de la UE y una experiencia más equitativa para los europeos de a pie en todo el territorio.
- Medidas contra las normas desproporcionadas: Hay una serie de regiones en la UE, como Barcelona y Bruselas, donde las complejas normas sobre los alojamientos de corta duración restringen la capacidad de los anfitriones para beneficiarse del uso compartido de la vivienda, incluso si comparten una habitación privada en su vivienda principal. Actualmente, la propuesta de alquileres de corta duración no contempla estos casos de normativas locales desproporcionadas que van más allá de los sistemas de registro. Airbnb cree que este tipo de normas desproporcionadas van en contra de los principios de la Directiva de servicios y los Estados miembros, por ello las autoridades locales deben trabajar para garantizar el cumplimiento de las normas, o enfrentarse a las intervenciones de la Comisión.
En la UE hay más de un millón de anfitriones en Airbnb, más que en ninguna otra región del mundo, y casi tres cuartas partes de ellos comparten una sola vivienda. El anfitrión típico gana algo más de 3.000 euros*, lo que equivale a dos meses de sueldo adicional para el promedio de los hogares de la UE. Además, más del 40% afirma que los ingresos adicionales les ayudan a hacer frente al aumento del coste de la vida**.