Airbnb propone nuevas soluciones para regular el alquiler de corta duración en Madrid y preservar las comunidades locales
Airbnb ha enviado hoy una carta al alcalde de Madrid en la que detalla un conjunto de soluciones para regular los alquileres de corta duración en la ciudad. Estas soluciones tienen como objetivo que las familias y los negocios locales mantengan los beneficios que generan los viajeros que se alojan en estas casas y, al mismo tiempo, ayudar a combatir los problemas de vivienda o el turismo de masas en determinadas zonas de la ciudad.
Airbnb ha ofrecido a Madrid su colaboración para trabajar en una regulación que proteja la posibilidad de que los anfitriones locales puedan hospedar de manera ocasional. También propone que las normas faciliten que se disperse el turismo más allá del centro de la ciudad, preservando las comunidades locales y poniendo fin a un modelo que solo beneficia a un pequeño grupo de empresas, sin que ello solucione los retos de la disponibilidad de viviendas o la concentración de la actividad turística.
Estas soluciones están en línea con los compromisos de Airbnb de trabajar con los gobiernos en toda la Unión Europea, incluyendo el apoyo a políticas específicas y el intercambio de datos con las autoridades. Sin embargo, la propuesta actual del Ayuntamiento está lejos de cumplir con los estándares de proporcionalidad que se exigen a nivel europeo, será muy difícil de aplicar en la práctica y castiga injustificadamente a una modalidad alojativa que, a día de hoy, contribuye a que Madrid sea un referente turístico a nivel internacional.
Los datos muestran que no hay una relación causal directa entre el aumento sustancial de los precios de alquiler en Madrid en los últimos años y el desarrollo de los alojamientos de alquiler de corta duración. Según datos oficiales, los alojamientos de alquiler de corta duración en Madrid representan menos del 1% del parque total de viviendas en la ciudad. En Airbnb, los alojamientos dedicados exclusivamente al alquiler de corta duración son sólo 2 de cada 10 anuncios y representan únicamente el 0,3% del total de las viviendas en la ciudad. Mientras tanto, existen 97.178 viviendas vacías en Madrid, que representan el 20% del total de viviendas (según los últimos datos publicados por el INE).
Más de la mitad de los alojamientos de alquiler de corta duración en la ciudad se encuentran repartidos por 20 barrios fuera del distrito Centro, que representan no más del 1,2% del total de viviendas en esas áreas. Los datos también muestran que los distritos de Madrid que han experimentado el mayor aumento porcentual en los precios de alquiler desde 2015 (como Puente de Vallecas, Latina, Usera, Villaverde y Carabanchel) tienen un porcentaje mínimo de oferta de alquiler de corta duración (menos del 0,6% del inventario total de viviendas en esos barrios). Por su lado, en el distrito Centro, que registra el mayor porcentaje de alojamientos de alquiler de corta duración en comparación con el total de viviendas (7,6%), el crecimiento de los precios en esta zona ha estado en línea con las subidas del mercado.
Falta de construcción de viviendas y viviendas vacías, principales desafíos
Airbnb se toma muy en serio el problema de la vivienda, especialmente en ciudades de alta demanda como Madrid. Sin embargo, las medidas que se han planteado por parte del actual gobierno no abordan los desafíos subyacentes en la vivienda, ya que el porcentaje de alojamientos turísticos en la mayoría de los barrios de Madrid es mínimo y no tiene un impacto significativo en el mercado de la vivienda.
Según datos públicos, existe una discrepancia entre la oferta y la demanda de viviendas en Madrid. Entre 2015 y 2023, el número de nuevos hogares en Madrid se duplicó en comparación con las unidades residenciales construidas, dejando un vacío de más de 54.000 viviendas necesarias para cumplir con esa demanda.
Soluciones para Madrid
Airbnb está decidido a trabajar con Madrid en soluciones que favorezcan el desarrollo sostenible de esta modalidad alojativa y que tengan en cuenta el impacto positivo que tiene esta actividad en la economía local:
- En el distrito Centro, donde la densidad de alojamientos de alquiler de corta duración es mayor, Airbnb sugiere permitir únicamente nueva oferta de anfitriones ocasionales, es decir, de aquellos que alquilan de manera ocasional su residencia principal o incluso una habitación en su propia casa, mientras están en ella. Esto no elimina las unidades del mercado, ya que son viviendas principales.
- Favorecer la colaboración efectiva entre Airbnb y el Ayuntamiento de Madrid para garantizar la implementación armonizada de la reciente normativa europea sobre alquileres de corta duración, cuya ambición es asegurar un entorno más justo y aumentar la transparencia de datos que permita a las administraciones públicas tomar mejores decisiones.
- Trabajar estrechamente con las autoridades turísticas de la ciudad para fomentar la dispersión del turismo, dentro de la propia ciudad y desde la ciudad a las zonas rurales, más allá de los destinos tradiciones y de las fechas con mayor afluencia.
- Dispositivos de ruido obligatorios. En Madrid, más de 3.500 VUTs tienen instalado un sensor para monitorizar el ruido y el promedio de alertas de ruido por dispositivo es menos de un 1%, que se resuelven en menos de una hora.
“La crisis de la vivienda es un problema complejo, que comprende múltiples factores, como viviendas vacías, construcción limitada, crecimiento de la población, etc. Culpar exclusivamente a los alojamientos de alquiler de corta duración simplifica en exceso estos grandes retos, ya que las soluciones requieren enfoques y políticas más integrales. Airbnb quiere colaborar con Madrid en reglas proporcionadas y efectivas, que tengan en cuenta las necesidades de cada barrio, permitiendo que las familias locales se beneficien del turismo, dispersando a los visitantes, protegiendo las primeras residencias y preservando las comunidades locales frente a la especulación”, dijo Sara Rodríguez, responsable de políticas públicas en Airbnb para España y Portugal.
El daño ocasionado a los anfitriones, el empleo y los negocios locales
Los recientes casos de Nueva York o Escocia son ejemplos relevantes de cómo normativas desproporcionadas sobre alojamientos de alquiler de corta duración, que no tienen en cuenta la realidad local o que se utilizan como único medio para corregir los desequilibrios en la vivienda, no solo han demostrado ser ineficaces para abordar los problemas de la vivienda, sino que además tienen un impacto negativo en la economía local.
El impacto económico del alquiler de corta duración en Madrid es significativo. Un estudio realizado por Oxford Economics en 2021 reveló el impacto significativo de la comunidad de anfitriones y huéspedes de Airbnb y los negocios locales en Madrid. Según concluyó esta reconocida firma de análisis económico, los gastos de los viajeros que reservaron a través de Airbnb generaron directamente más de 12.000 empleos en la ciudad, excluyendo a los propios anfitriones. Esto incluye aproximadamente 3.700 empleos en el sector de la restauración y casi 4.400 en negocios locales. Oxford Economics también destaca que el impacto económico bruto del gasto de los visitantes alcanzó casi mil millones de euros (1.100 millones de dólares) en 2019, lo que representa el 16% del gasto turístico total en la capital española.
Según datos internos de Airbnb, en Madrid:
- El 74% de los anfitriones dicen que el alojamiento les permite hacer frente al aumento del coste de vida y llegar a fin de mes.
- El 72% de los anfitriones dicen que ser anfitrión en la plataforma no es su ocupación principal.
- Hasta junio de 2024, el 75% de los anfitriones tiene solo un anuncio en Airbnb.
- En 2023 el anfitrión típico en Madrid tenía un ingreso anual de 6.400 euros (aproximadamente dos ingresos mensuales del sueldo promedio en España).