El potencial de las segundas residencias en Andalucía

Airbnb destaca el potencial de las segundas residencias como motor de las economías locales en los municipios andaluces

  • De acuerdo con el INE, casi una de cada tres viviendas en Andalucía está vacía o es una segunda residencia
  • Las poblaciones Andaluzas con mayor número de viviendas no principales son las que más crecieron en llegadas de viajeros y de anuncios en 2018

Los municipios andaluces con más segundas residencias y viviendas vacías son los que registraron un mayor incremento de llegadas de viajeros y un mayor interés por anunciarse en la plataforma Airbnb. Las segundas residencias y las viviendas vacías -es decir, las viviendas no principales-, suponen un amplio porcentaje del parque inmobiliario de toda España (28%), especialmente en las localidades con menor población. En Andalucía, el porcentaje de viviendas no principales alcanza el 29% de media. 

“Al aprovechar viviendas que de otra manera estarían vacías, los propietarios tienen la oportunidad de darles un nuevo uso, ayudando así a su mantenimiento y atrayendo a visitantes de calidad a esos destinos. Los anfitriones andaluces que anunciaron su vivienda en verano de 2018 ingresaron 1.800€ de media durante esos meses”

Armand Palau – Responsable de Operaciones de Airbnb Marketing Services SL

En general, las poblaciones andaluzas muestran una correlación entre poblaciones con altas tasas de viviendas secundarias, crecimiento de anuncios y crecimiento de llegadas de turistas, principalmente en los meses de verano. El aprovechamiento de estas viviendas no principales como alojamiento turístico impulsa el crecimiento de las economías locales  y permite a sus dueños obtener un dinero extra para mantener los gastos de la propiedad.

En la franja de poblaciones de 1.000 a 2.000 habitantes la llegada de viajeros que encontraron alojamiento a través de Airbnb creció un 33% en verano de 2018 y un 40% en el conjunto de ese año. En este grupo de municipios, los propietarios de viviendas también registraron un notable interés por ofrecer alojamientos turístico en la plataforma, con un incremento de casi el 20% interanual en el número de anuncios. Entre los municipios que figuran en este rango se encuentran poblaciones como Zahara de los Atunes, Gaucín o Canillas de Aceituno. Son precisamente las localidades con menor población las que cuentan con un mayor porcentaje de viviendas no principales. En concreto, los municipios andaluces de menos de 2.000 habitantes registran tasas de entre el 38% y el 56% de viviendas no principales, muy por encima de la media de Andalucía. 

El turismo que llega a estas poblaciones a través de Airbnb lo hace para encontrar una experiencia local e integrada con el destino. En las tres localidades localidades mencionadas anteriormente, por ejemplo, el perfil de viajero es marcadamente familiar, con reservas que superan las tres personas de media; con una edad media de los viajeros de entre 40 y 46 años; una estancia media de 4,5 a 6 días y una puntuación de los viajeros por parte de los anfitriones que supera los 4,8 puntos (sobre un máximo de 5). Los anfitriones, por su parte, alquilan su casa entre 24 y 26 noches al año, una señal de que el el alquiler turístico puede suponer un complemento de renta o una actividad ocasional prestada en las segundas residencias de esos anfitriones. En el conjunto de Andalucía las medias son similares, con estancias medias de 4 días, 35 noches reservadas y una edad media de 38 años, mientras que los anfitriones comparten su casa una media de 35 noches al año.

Las poblaciones de entre 50.000 a 100.000 -con destinos tradicionalmente vacacionales como Benalmádena, Estepona, Chiclana de la Frontera, Mijas, Sanlúcar de Barrameda o Roquetas de Mar- también cuentan con un porcentaje de viviendas no principales (35%)1 superior a la media andaluza. En esta franja de poblaciones, las llegadas de viajeros a través de Airbnb aumentaron un 30% en 2018 (el 24% en verano), lo que también se correspondió con un mayor interés por anunciarse en la plataforma Airbnb, con un incremento del 20% en el número de anuncios2 en el mismo periodo.

Regulación clara

El home sharing ha avanzado mucho en Andalucía hasta disfrutar de un marco legal que aporta claridad a las miles de familias que confían en Airbnb. La región cuenta con una ley que permite no solo que el registro sea fácil, sino que también legitima a las personas que comparten su propia casa ocasionalmente.

Como parte del compromiso y colaboración con las autoridades en Andalucía, Airbnb añadió hace un año una nueva funcionalidad a la plataforma, que facilita que los anfitriones de toda la comunidad autónoma incluyan en su anuncio el número de licencia que obtengan por parte del gobierno regional. También eliminó aquellos anuncios que no mostraban el número de la licencia correspondiente.

Los visitantes que encuentran alojamiento a través de Airbnb generan un impacto positivo en el territorio y en los comercios locales. De acuerdo a una encuesta que realiza cada año Airbnb entre lo usuarios de la plataforma (viajeros y anfitriones):

Impacto de Airbnb en Andalucía

Los viajeros y los anfitriones que utilizaron la plataforma Airbnb en 2018 generaron más de 1.128 millones de euros de impacto económico directo en Andalucía.

+1.1M€

de impacto económico directo en Andalucía entre viajeros y anfitriones.

Los visitantes que encuentran alojamiento a través de Airbnb generan un impacto positivo en el territorio y en los comercios locales. De acuerdo a una encuesta que realiza cada año Airbnb entre los usuarios de la plataforma (viajeros y anfitriones):

71%

de los huéspedes afirman que querer explorar una localidad o un barrio en concreto influye en su decisión de usar la plataforma de Airbnb

91%

de los anfitriones andaluces recomienda a sus huéspedes qué visitar y dónde a donde ir

78%

de anfitriones andaluces ayuda a sus huéspedes con información cultural y gastronómica.

44%

de los gastos por huéspedes es en el barrio en el que se alojan

74%

de los huéspedes afirman que viajan acompañados en familia

51%

de los huéspedes usa el dinero ahorrado en alojamiento en visitar la ciudad