Por un enfoque armonizado y europeo de la regulación catalana

Molt Honorable president de la Generalitat de Catalunya:

Airbnb nació después de que dos de sus cofundadores, para poder pagar el alquiler, abrieran las puertas de su apartamento en San Francisco a los visitantes de esa ciudad. Diez años más tarde, decenas de miles de familias en Cataluña están haciendo lo mismo, y los ingresos obtenidos al hospedar les ayudan a llegar a fin de mes.

Airbnb siempre ha respaldado la normativa catalana que facilitaba el registro de la actividad, el pago de impuestos y el reconocimiento de las ‘llars compartides’. Para ayudar a garantizar que las normativas se cumplen, Airbnb implementó una herramienta que obliga a los anfitriones a mostrar su número de registro en la plataforma, siempre que sea necesario, facilitando que las autoridades puedan llevar a cabo sus acciones de inspección de manera más precisa.

Ahora que su gobierno plantea introducir nuevas normas que afectan a la actividad de los anfitriones, Airbnb quiere seguir aportando soluciones que contribuyan a abordar la actividad especulativa, mitigar potenciales impactos negativos del turismo de masas y proteger a las familias locales que comparten sus hogares.

Para garantizar su eficacia, instamos al Gobierno de Cataluña a que primero lleve a cabo una evaluación de impacto de las normas turísticas existentes, que se han modificado cada año durante los últimos cuatro años. Del mismo modo, le pedimos que lleve a cabo una consulta pública que incluya a todos los agentes de esta actividad para escuchar sus perspectivas sobre las medidas propuestas.

Es vital comprender qué han logrado las diferentes normativas antes de introducir nuevas restricciones, cómo pueden funcionar las nuevas medidas y cuál será el impacto en cada uno de los municipios afectados y sobre las familias catalanas que comparten su hogar.

La oportunidad de acceder a información y datos sobre el impacto de los alquileres a corto plazo en Cataluña nunca ha sido mayor después de que la UE haya acordado un nuevo marco regulatorio para los alquileres a corto plazo. Con este nuevo marco, las autoridades de Cataluña podrán mejorar los sistemas de registro, respaldados por el intercambio de datos con plataformas, y obteniendo información detallada sobre quién aloja, dónde y con qué frecuencia.

Las autoridades de Cataluña podrán utilizar esa información que brinda el marco europeo para desarrollar una regulación que restrinja específicamente las actividades no deseadas y, al mismo tiempo, proteja a quienes comparten su casa y proporcione una capacidad de alojamiento vital para muchos destinos, especialmente en las zonas rurales. Esto contrasta con la propuesta actual, que directamente restringe la actividad sin evidencias suficientes sobre dónde se encuentran los desafíos; un enfoque que probablemente tenga consecuencias no deseadas, como no permitir que los habitantes y comercios locales de esos municipios se beneficien del turismo en lugares con una gran oferta de viviendas pero muy poca población.

En Cataluña, casi 4 de cada 10 pueblos carecen de opciones de alojamiento, y en muchos otros municipios que dependen del turismo estacional, las viviendas familiares ya existentes desempeñan un papel crucial en la economía local. Gracias a estos miles de hogares familiares que se extienden por centenares de pueblos en Cataluña y se comparten con viajeros cuando sus dueños no los están utilizando, tanto los negocios locales como los propios pueblos obtienen beneficios directos sin tener que construir más infraestructura turística.

Los anfitriones en Airbnb en Cataluña¹ son principalmente ciudadanos de a pie y familias locales que anuncian una sola propiedad. Según una encuesta interna de Airbnb, casi 9 de cada 10 anfitriones en Cataluña afirman que el espacio que anunciaron les pertenecía a ellos o a sus familias y más de dos tercios de los anfitriones y anuncios en Airbnb en Cataluña están ubicados fuera de los principales centros urbanos².

Airbnb sigue comprometida en trabajar de manera conjunta con la Generalitat allá donde haya tensiones en el mercado de la vivienda y en luchar contra el turismo de masas, pero es necesario asegurar que las nuevas normas son efectivas para todos y consiguen sus objetivos sin dañar a los ciudadanos de a pie. Esperamos poder trabajar de manera conjunta en estos objetivos tan importantes.

Atentamente,

Mónica Casañas

Directora General de Airbnb Marketing Services