Profesionales sanitarios y anfitriones ¡Gracias por vuestro apoyo!

  • Más de 3.200 anfitriones de más de 20 ciudades en España se han sumado a la iniciativa, ofreciendo 4.700 alojamientos

Desde que Airbnb lanzara a principios de abril su programa de alojamiento para profesionales sanitarios en España, han sido muchos los anfitriones que han abierto sus puertas a quienes luchan día a día contra la pandemia de la COVID-19.

Este programa conecta a profesionales sanitarios que necesitan un lugar en el que descansar, sin riesgo de contagiar a sus seres queridos, con anfitriones que ofrecen sus espacios de manera gratuita o a un coste reducido. En España, desde que se comenzara a notificar a los anfitriones sobre el programa, más de 3.200 anfitriones de más de 20 ciudades se han sumado a la iniciativa ofreciendo 4.700 alojamientos a los profesionales sanitarios.

Ver la respuesta de nuestra comunidad nos emociona y nos hace sentir orgullosos. Por esta razón, hemos querido compartir algunas de las historias de los anfitriones y huéspedes que están participando en el programa:

Irene, 40, anfitriona en Vigo

Soy hija de personal sanitario, así que sé bien a lo que están expuestos estos días. Cuando recibí la solicitud de una médico durante la crisis, no dudé en aceptarla y ponerle las cosas fáciles, ya que bastante complicado lo tienen ya en su jornada laboral.

Utilizo Airbnb desde hace más de 5 años, ya que vivo en una casa unifamiliar con varias plantas: en una vivo con mi familia, y cuento con 2 pisos más con todas las comodidades para estancias largas o cortas.

En uno de los pisos se aloja la médico, y en el otro dos personas que trabajan en gasolineras, un servicio esencial.

Me alegra poder ayudar, aunque sea un poquito, para que quienes luchan por nuestro bienestar se sientan como en casa. 

Laura, 23, huésped en Barcelona

Soy enfermera en Barcelona y vivo con mi madre, que es una persona de riesgo ante enfermedades respiratorias. Por eso, cada día iba a trabajar con miedo, pensando que al llegar a casa podría estar contagiando a mi madre.

Soy usuaria de Airbnb desde hace años, siempre lo uso para viajar. Así que cuando recibí un email informándome sobre la iniciativa Open Homes, me apunté al momento.

Estoy muy agradecida: he tenido muchísima suerte con mi anfitriona, en todo momento ha sido súper comunicativa y todo han sido facilidades. Y lo está haciendo sin nada a cambio, solo porque ella ha querido colaborar. Gracias a ella y a esta iniciativa puedo ir a trabajar más tranquila, sabiendo que a volver a casa para descansar no corro el riesgo de contagiar a mi familia.

Encarni, 37, huésped en Alicante

Soy trabajadora social: mientras nuestros compañeros sacan todo su armamento para salvar vidas, nosotras nos ocupamos de que esas vidas tengan el bienestar que todos merecemos, al que tenemos derecho y el que en situaciones de crisis y pandemias se ve alterado más que nunca. Contar con una casa donde poder descansar tranquilamente, sin tener que preocuparte sobre si vas a contagiar a alguien y que además está cerca del trabajo es algo de lo que estoy inmensamente agradecida.

Antes de entrar en el alojamiento hablé por teléfono con mi anfitriona. me pareció conveniente tener una pequeña conversación y escucharnos, hubo buen feeling, la anfitriona me pareció encantadora y aquello me hizo sentir que me encontraría cómoda estando en su casa.